EL ALMA PURA
Madre cuando cojo mi pluma, Quiero escribirte, Decirte madre tantas cosas, Aunque en mi memoria, Las tengo todas, Tengo tantas que mi corazón, No quiere dejar salir ninguna, Fuiste madre como todas las madres, Puro amor, y el alma pura, Aunque eras joven, Tu cuerpo lo tenia, mas gastado que ninguna, Tu corazón... era del mundo, de todos y de todas… Siendo una niña, tú me veía como a un ángel, Ese que secaba tus lágrimas, Y las guardaba, para besarla, Sin que me viera nadie, en mi soledad y a oscura, Sin tener nada... siempre dabas, a quien tenia menos que tú, Trabajaste mendigaste, te encarcelaron, Por pedir un trozo de pan, para tus hijos, Los que parió tú cuerpo, Y los que parió tú alma, Todos los que tendían sus manos, Pidiéndote pan amor y ayuda, Tú no mirabas sus ideologías, Ni sus tendencias sexuales, Ni si eran prostitutas, En tu manto los metías, tu corazón los amaba a todos, Sin distinción ninguna, Te llevaste el dolor de todos, Y yo era la más feliz de las niñas, Tenía la mejor maestra, De la humildad, la sencillez, la bondad, El amor, y el alma como las rosas, blanca y pura, Tu cruz fue tan pesada, que creo que como , la tuya ninguna, Y yo con mi cuerpecito frágil Ponía mi hombro, para que descansaras, "un poco" nos reíamos de los dolores, Y aunque nuestras lagrimas, eran de dolor, Siempre lo hacíamos, con la risa y la ternura, Así que cuando Dios ... me dijo que se llevaba, Mi ternura, mi pregunta fue, ¿Dios será feliz? Me dijo no te quepa la menor duda, Entonces seque mis lágrimas, Y dije Dios, no mires que me quedo sola, Solo te pido que ella no sufra, Era casi una niña, cuando El, Se llevo lo más grande, mi madre, Con un corazón inmenso, Y el alma, AY…Dios" el alma, Era la más bella de las rosas, blanca y pura, Gracias por ser mi madre.
SALINA
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